Tal vez para alegría de algunos y desesperación de otros, hoy voy a volver a tocar temas concernientes a mi querida Novelda, y es que ayer tuve que decidir entre dos temas que me parecían muy importantes, pues en ambos se conjugan corrupción y construcción.
Del tema de hoy hemos hablado muchas veces todos los amigos, principalmente el día de la Subida de la Santa, que para quien aún no lo sepa es el Santo Grial o Santa María Magdalena.
En ese día se devuelve a nuestra patrona a su Santuario, al lado del Castillo de la Mola, y se pasa por la Cañada Real de las Fuentes de Aspe, lo que urbanísticamente debería ser intocable. Pero un año vimos como un ricachón había construido allí un enorme caserón y había vallado el terreno circundante. Aunque no valló sólo su terreno sino que se anexionó parte del terreno perteneciente a esta Cañada, lo cual siempre ha sido evidente para los vecinos de Novelda.
Por suerte nuestro Ayuntamiento, digo yo que algo tendrá que ver el cambio de equipo de gobierno en ello, se ha interesado por el asunto, lo que a los de la gaviota les traía sin cuidado. Y así se han decidido a estudiar los límites de esa propiedad, ¡ya era hora!
Vinieron los Técnicos de Medio Ambiente de la Conselleria y realizaron el amojonamiento, palabro que para quien no lo sepa significa la medición de los límites de una propiedad.
Todo ello ha sido gracias al movimiento del grupo Ecología i Pau que han luchado por el reconocimiento del espacio público de los límites vallados de este chalet, que más parece un búnker.
Pero por supuesto, el dueño de la casa insiste en quedarse con lo que no es suyo, y lanza a su perro de presa, su abogado contra ese grupo ecologista, aferrándose a la poca fiabilidad e inexactitud técnica a la hora de fijar los límites de los terrenos. Sin duda deja muy claro que como abogado es un hombre de letras, ya que debe pensar que en la Edad Media se medía mejor que ahora que disponemos de tecnología GPS para situar el terreno y medidores láser, sin duda todo muy impreciso sí...
Y como no le quedaba otra cosa que hacer, hizo también lo que hacen todos los que se quedan sin argumentos: atacar a quien te ataca. Así, este abogadillo se atrevió a cargar contra el grupo de ecologistas diciendo que alardean de esos hechos pero que no miran los que les conciernen a ellos porque se encuentran involucrados en otras causas judiciales. Y es que también han sido denunciados por una presunta ocupación en la zona de La Tejera. Es decir, que trata de escurrir un delito diciendo que otros también los cometen.
Nunca me han puesto una multa de tráfico, pero sí un día sucede, por ejemplo por exceso de velocidad, le diré a loa agentes que ellos para pillarme con su moto han corrido más que yo, o que me ha adelantado un coche mientras yo incumplía las normas. Pero está claro que culpar a otros de otros hechos, nunca servirá de base para declarar la inocencia del culpable de un hecho diferente y probado.
Según tengo entendido, el propietario se negó a que los técnicos pusieran estacas en “su” propiedad delimitando la Cañada, no dejándoles entrar. Aunque por lo menos los técnicos pudieron recoger datos de las mediciones que harán llegar al juez de turno y dentro de unos cinco añazos dictará sentencia sobre el caso. ¿En cinco años hay tiempo suficiente para untar a un juez? Confiemos en la Justicia, aunque sea por una vez...
Espero que el dueño de la propiedad sea castigado como merece, porque de lo contrario, yo dentro de un tiempo me construiré una casa en medio de una autovía para estar bien comunicado, sólo tengo que vallar un poco de terreno de más y decir que es mío, y sanseacabó.
En otro orden de cosas, el juicio de una broma que pudo haber costado vidas humanas en el año 2006, también en Novelda ha quedado visto para sentencia. ¿Cuál fue la bromita? Nada menos que incendiar una casa, lo que afectó a otras colindantes, de hecho dos quedaron en estado de ruina.
Este incendio lo causaron unos adolescentes, fruto de la gran educación que le dan sus padres y la telebasura que ven a diario en todos los canales de televisión. Pero sólo fue un bromita, ¡ay!, ¡qué risa tía Marisa!
Cuatro menores están procesados por este hecho, aunque tan sólo se ha celebrado el juicio en lo concerniente a una de las autoras de los hechos de momento, para quien el fiscal ha pedido nada menos que once años de prisión, yo creo que merecidos, porque de gamberrada sin premeditación tiene poco. ¿Os imagináis que el incendio se hubiese extendido por todo el barrio? ¡Menuda catástrofe!
Todo vino a raía de que una pandilla de adolescentes decidió acosar a una vecina: la insultaban, la golpeaban, tiraban piedras contra su ventana, le llegaron a robar el bolso, dañaron su coche y otros actos vandálicos más. ¿Qué puede llevar a casi unos niños a realizar algo así? Necesito un psiquiatra que me lo explique, o un sociólogo, porque este tipo de comportamientos tan agresivos y sin venir a cuento no tienen ninguna justificación.
Puede que la afectada alguna vez les llamase la atención porque la molestaban o algo similar, pero la respuesta de los adolescentes fue desmesurada, y es que Novelda en algunos lugares parece el Far West.
La mujer acosada de es manera tan indigna había puesto numerosas denuncias contra esa pandilla por el acoso que sufría, y la respuesta fue el incendio de su casa. Cosa que se atrevió a negar la acusada después de haberlo admitido en un principio, con la coartada de un par de amigas que decían que estaban con ella en ese momento en otro lugar.
Pero la misma acusada previamente había admitido los hechos, pero claro, supongo que su buen abogado, siempre buscando la justicia y la verdad, le habrá dicho que lo niegue y que dijese que en su día lo admitió bajo coacción. Y es que así son los abogados. Por suerte un tercer amigo sí que la implicó en el incendió, y éste fue el que se atrevió a decir que sólo fue una broma, menos mal, que si llegan a ir en serio...
La afectada será la única que sepa el calvario que ha pasado en todo este tiempo, pues se ensañaron con ella brutalmente, ya que un día intentaron incendiar su casa pero no lo consiguieron, al día siguiente lanzaron piedras contra su balcón y unos días después entraron en la casa de la mujer tras abrir la puerta de una patada y le prendieron fuego a la casa desde dentro, dejándola en ruinas, y con todas las valiosas pertenencias que contenía calcinadas.
Ahora que paguen por ser más bárbaros que los hunos, que caiga sobre ellos todo el peso de la ley, que para eso está.
Y con estas palabras os dejo por hoy, queridos lectores. Espero que mis palabras no me lleven a la hoguera, a la que fueron unas cuantas casas. Supongo que todos coincidiréis conmigo en que el castigo del fuego purificador lo merece el propietario de la casa que ha usurpado terreno perteneciente a una Cañada Real, con toda su cara dura, de igual modo que Saddam entró en Kuwait en su día. Por supuesto también lo merecen los vándalos adolescentes acosadores e incendiarios que hicieron sufrir a esa pobre mujer lo que no está escrito. Y también nuestra sociedad, porque se ha desarrollado tan bien que permite que ocurran todas estas cosas.
¡Buenas noches!
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