Ya ha finalizado el congreso del PP. ¡El rey ha muerto, viva el rey! ¡Ah no!, que el rey del “anticarisma” y líder del PP sigue en su trono, ¿entonces cuál ha sido la utilidad de ese congreso? Yo no la veo tan clara como parecen afirmar los que, muy contentos, hablan de lo bonito que ha sido todo y del vigor que ha adquirido su partido gracias al dicho congreso de marras.
Antes de comenzar su congresillo, el capitán del buque valenciano, el inefable Camps, osó decir contra viento y marea que el Partido Popular era un buque al que habían puesto con un rumbo determinado y que ahí seguían. ¡Bravo capitán, bravo! Si siguen ese rumbo establecido pronto chocarán con algún iceberg. Pero lo mejor del caso es que ese iceberg no está necesariamente fuera de su buque, sino que un cubito de algún refresco del propio buque, crecerá y crecerá, haciéndose enorme hasta romper el casco desde dentro. Por tanto seguid ese rumbo...
El PP no tiene bastante con las amenazas que le llegan desde fuera, que necesita resquebrajarse por dentro, y lo peor es que creen que con ese congreso han mitigado todos sus propios males, ¡qué ilusos!
Pero la verdad es que durante el congreso, contrariamente a la frasecilla de Camps, el PP ha tratado de variar su rumbo, ha dado un giro hacia el centro, y es que si Camps no se había dado cuenta, durante los últimos años el PP se dirigía hacia el exterior, y no hacia el centro, ya que su rumbo apuntaba hacia la derecha más dura, y en algún caso hacia la ultraderecha, pese a quien pese, motivo por el cual no han ganado las dos últimas elecciones.
Durante los últimos tiempos el PP se ha atrincherado tras la mentira y la más dura crispación de la ciudadanía española, lo que le ha dado frutos a fin de seguir en la oposición. Además todo ello ha creado un mal clima político en España, con el consiguiente desprecio a la clase política, ya que, a veces ayudados por los “PSeudorojos” del PSOE, han conseguido que sea posible decir que algo es blanco, para posteriormente decir que es negro, y lo que es peor, que el que dice ambas cosas, se las crea y pueda dormir plácidamente como una marmota.
Pero menos mal que ahora han cambiado el rumbo... Parece que van a tratar mejor a los partidos nacionalistas y que ahora van a hacer críticas constructivas en el tema de la economía, ése de la crisis, sí Zapatero por si no te has dado cuenta hay crisis. Sinceramente me alegro si es cierto, ya que nunca me ha gustado ver a la gente poderosa aislada del resto del mundo y que por ello no puedan conseguir sus objetivos, ¿o sí?
Aunque la verdad es que yo no creo que sea posible ese giro al centro, claro que yo no soy un gran profeta, pues su buque está inundado de marineros de primera que no quieren girar al centro, que se pueden amotinar y montar otra crisis interna, como la que parece que tampoco ha habido en el seno del PP hasta hace bien poco.
Con el congreso de Valencia puede parecer que se han preparado para luchar contra los posibles icebergs externos que puedan encontrarse en su nuevo rumbo, los otros partidos políticos, pero no es así porque el iceberg interno, gran suma de pequeños icebergs, no ha sido fundido totalmente. Me quedan muchos ejemplos en este congreso: la no presencia de la ex jefa vasca y de Ortega Lara en cuanto al beligerante norte, la presencia de los ejemplares de la más dura derecha, etc.
El gran líder, para aglutinar el voto en otros partidos, Aznar, volvió a hacer de las suyas, ya que saludó efusivamente al mentiroso Acebes y no así a Rajoy, al que ni siquiera miró, y si no mirad las imágenes y sacad vuestras propias conclusiones. Se puede entender que la historia sea difícil de apartar, un claro ejemplo es Fraga, y que incluso esa historia se pueda hinchar y doler cada vez que hace declaraciones. Pero el caso es que en estos temas yo no veo nada claro el cambio de rumbo, y si no ahí están “los ángeles de Rajoy”, esto es, las nuevas mujeres que Rajoy va metiendo en su cúpula a imagen y semejanza de la paridad malentendida de Zapatero. El motivo es que en el PP parece que sigue el rumbo de la mentira, ya que la nueva portavoz, una mujer joven aunque vista como mi abuela, se atrevió a declarar que lo del saludo de Aznar no fue así, a pesar de que todos los españoles hemos visto las imágenes en que Aznar, más que saludar, desprecia a Rajoy.
Uno de los ingredientes más importantes del iceberg interno va a seguir siendo la tronca Espe, actual jefa de los madrileños, ya que sólo ha perdido una batalla, pero no la guerra, por lo que señaló que se sentía en el partido como un verso suelto, aunque después haya dicho que sólo se trataba de una broma y de ironía. Pues chica, a mí me parece más otra meadilla fuera del tiesto, de las que de vez en cuando nos dan los dirigentes del PP, como la de Rajoy, que hace un tiempo y cuando no había crisis en su partido, mandó a todos los que no pensaban como él al Partido Liberal, gente que por cierto no ha cambiado el rumbo, y ayudará a que en un futuro congreso el iceberg interno hunda al buque.
Para que el PP pueda seguir su marcado rumbo, Rajoy se ha rodeado de “los hombres de Arenas” (y mujeres claro), aunque no sé si serán mejores que los hombres de Paco. Con ello trata de seguir el mismo camino que tan mal resultado le ha dado al PSOE, esto es, privilegiar a unos barones frente a otros, aunque el señor Fraga diga en la SER que en su partido no hay barones, ¿otra mentira?
Está claro que la baronía de Arenas ha salido favorecida frente a la de Aguirre y otras como la de Camps, el que ni fu ni fa a pesar de su apoyo incondicional a Rajoy. Por cierto, cabe señalar que el señor Arenas es todo un terrateniente andaluz, sin duda la nueva imagen que busca el PP con su cambio de rumbo, ¿no? Pero Camps dijo que mantenía su rumbo, ¡vaya lío!
En fin, tengo claro, que como las elecciones serán en 2012, el PP hará antes un nuevo congreso para elegir al candidato a la presidencia de España, y que entonces todas las voces discordantes del iceberg interno, que ahora se han callado, hablarán y hundirán su preciado buque. ¿Será Rajoy el último en abandonar la nave?
Con esto lo dejo por hoy. Puede que mis palabras sean merecedoras de la hoguera para muchos seguidores del PP, aunque a mí no me cabe duda que quienes merecen el castigo del fuego purificador son otros muchos seguidores del PP por ser unos mentirosos y tener tan poca inteligencia que no se dan cuenta de que no ven nada porque les han puesto una venda negra (¡anarquista no!) en los ojos.
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